GABINETES

Se usan para proteger equipos eléctricos contra polvo, agua, impactos mecánicos y otras condiciones ambientales. También ayudan a ordenar la instalación eléctrica y a facilitar su mantenimiento.

Una caja modular es más pequeña y se usa para instalaciones básicas con breakers. En cambio, un gabinete es más robusto y versátil, ideal para sistemas más complejos, especialmente en aplicaciones industriales o comerciales.

Hay varios, según su uso y ubicación:

• Gabinetes de pared: se fijan sobre muros, ideales para oficinas, almacenes o cuartos eléctricos.
• Gabinetes de piso (tipo columna o rack): usados en plantas industriales o centros de datos.
• Gabinetes IP65/IP66: resistentes al agua y al polvo, aptos para exteriores o zonas expuestas.
• Gabinetes para redes: diseñados específicamente para organizar cableado y equipos de telecomunicaciones.

Los más comunes son:

• Acero pintado o galvanizado: muy resistentes y duraderos.
• Acero inoxidable: ideales para ambientes agresivos o con humedad (como fábricas de alimentos).
• Poliéster o plástico reforzado (GRP): resistentes a la corrosión, más ligeros y dieléctricos.

Son grados de protección contra polvo y agua. Por ejemplo:

• IP65: totalmente protegido contra el polvo y chorros de agua.

• IP66: resiste chorros potentes de agua y ambientes hostiles.

• IP67: incluso puede sumergirse temporalmente en agua.

Estos grados te indican dónde puedes instalar el gabinete: si es en interiores secos, zonas con lluvia, polvo, o incluso al aire libre.