DISCOS Y LIJADORES​

La elección depende del material a trabajar y el tipo de acabado que deseas lograr. Para cortar metal, se recomienda un disco de corte reforzado; para desbaste, un disco abrasivo grueso; y para acabados finos, un lijador con grano fino. Es fundamental verificar la compatibilidad del disco o lijador con la herramienta que se va a utilizar.

El disco de corte es más delgado y está diseñado para realizar cortes precisos en metales, cerámica o concreto, mientras que el disco de desbaste es más grueso y se usa para eliminar material, suavizar bordes y dar forma a superficies.

No todos los discos y lijadores son universales. Es importante verificar el diámetro y tipo de conexión para asegurarse de que sean compatibles con la herramienta que se usará, como amoladoras, esmeriladoras o lijadoras orbitales.

Para maximizar su duración, se recomienda utilizarlos a la velocidad adecuada, evitar presionar demasiado contra la superficie de trabajo y almacenarlos en un lugar seco. También es importante limpiar los lijadores después de cada uso para eliminar residuos que puedan afectar su rendimiento.

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